Características Clínicas y Pronóstico del Fracaso Renal Agudo puro vs. Fracaso Renal Agudo sobre Enfermedad Renal Crónica

Características Clínicas y Pronóstico del Fracaso Renal Agudo puro vs. Fracaso Renal Agudo sobre Enfermedad Renal Crónica

Doctorado en Investigación en Ciencias de la Salud
Doctor/a: María Isabel Acosta Ochoa
Fecha de la lectura: 12/05/2022
Directores: Dr. Armando Coca Rojo
Tribunal: Emilio José González Parra (Presidente), María Del Pilar Fraile Gómez (Secretario), Vanesa Camarero Temiño (Vocal)

Introducción

El Fracaso Renal Agudo (FRA) implica un descenso abrupto de la función renal que se manifiesta por una disminución del Filtrado Glomerular (FG) y acumulación de Urea y Creatinina (Cr), entre otras sustancias de desecho.

Engloba alteraciones en la función y/o estructura de los riñones.

Constituye un problema mundial de salud pública

 

 

  • Incidencia 16 - 36% (aumenta en críticos)
  • Uno de cada cinco adultos lo pueden sufrir durante un ingreso
  • Principal causa de interconsulta hospitalaria a nefrología
  • Causa de inicio y persistencia en HD
  • Está asociado con mortalidad tanto intrahospitalaria como a largo plazo
  • Es un síndrome complejo con múltiples etiologías
  • Carece de tratamiento estándar

En 2012 se publican las guías del Kidney Disease: Improving Global Outcomes, Clinical Practice Guideline for Acute Kidney Injury (KDIGO-2012) que se basa en estratos de elevación de la creatinina basal (CrBa) y proporcionan un marco de estudio y estratificación de la severidad del FRA.

La prevalencia de la Enfermedad Renal Crónica (ERC) puede situarse entre el 8 - 16% de la población mundial, el FRA es más prevalente en pacientes con función renal alterada; y el FRA puede actuar como promotor de la progresión de la ERC de base. Las clasificaciones de FRA se han validado en estudios con gran cantidad de pacientes, aunque en algunos sistemáticamente se han excluido pacientes con ERC previa, tanto por sus peores características clínicas como por su menor reserva funcional renal; y en los que estos pacientes son incluidos no se subanalizan.

Desarrollo

Esta evidencia epidemiológica y clínica ha llevado a la descripción de un concepto clínico llamado FRA sobre ERC (AsERC). Sin embargo, no existe una definición estándar ni una escala adaptada para estudiarla ni para clasificar su severidad.

Para llenar el vacío metodológico en el abordaje de esta condición, partimos de la hipótesis que los pacientes con función renal previa normal se comportan de forma diferente a los pacientes con función renal alterada durante un episodio de FRA, aplicamos los estadios de la clasificación KDIGO-2012 a pacientes: con función renal normal previa (FGe ≥60ml/min/m2, grupo insuficiencia renal aguda pura: IRAp) y función renal alterada (FGe ≤59ml/min/m2 FRA sobre ERC: AsERC). Describimos las diferencias clínicas y de clasificación de severidad del episodio de FRA y en los resultados adversos mortalidad intra-hospitalaria (MiH), necesidad de Hemodiálisis (HD), persistencia en HD al alta.

Encontramos que los individuos del grupo AsERC eran mayores con un Índice de Charlson (ICh) mayor. Al aplicar el KDIGO-2012 más pacientes AsERC fueron clasificados en el Estadio 1, más IRAp en el Estadio 2, sin diferencias en el estadio 3. En el análisis multivariante ajustado por edad, sexo e ICh, encontramos que para alcanzar los efectos adversos de MIH y necesidad de HD, los pacientes AsERC necesitan un incremento menor sobre la CrBa. Aunque no encontramos diferencias en la mortalidad ni en la necesidad de HD, pero si en la dependencia de HD al alta ya que los individuos AsERC se ven significativamente más afectados.

Conclusiones

Concluimos que los pacientes del grupo AsERC presentan características clínicas diferentes que los pacientes IRAp. Al aplicar los mismos criterios de estratificación de severidad del FRA el grupo AsERC precisa de menores tasas de elevación de CrBa para presentar los resultados adversos estudiados. Por esta razón consideramos que los pacientes que sufren de ERC no deberían ser catalogados con los mismos criterios para estratificar el FRA. Y sugerimos una posible recalibración de los incrementos de Cr y de estratos de severidad para este grupo.

Entendemos que esta recalibración requerirá un amplio consenso por parte de la comunidad nefrológica y que deberá ser validada en una población mucho más amplia, incluyendo diferentes razas y múltiples etiologías tanto del FRA como de la ERC. Su aplicación implicaría también repensar los límites de los algoritmos para desarrollar los modelos predictivos de mortalidad y efectos adversos del FRA a través de las alertas electrónicas que son generadas por inteligencia artificial y machine learning.

Consideramos que esta nueva estratificación tendría también utilidad en otra importante población, los pacientes trasplantados renales, quienes son clasificados como pacientes con ERC y en los cuales un episodio de FRA implica consecuencias poco deseables, que pueden llegar incluso hasta la pérdida del injerto. Otros grupos de pacientes a los que podría beneficiar una clasificación de severidad del FRA, con límites más bajos por estrato, podría incluir a los individuos con un solo riñón funcionante, los que tienen quistes o piedras, quienes también se consideran como enfermos renales crónicos.